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Cine sobre el Trastorno de Personalidad Límite (TLP) o Borderline
Si bien en el cine se suelen relacionar los Trastornos de Personalidad con personas violentas capaces de cometer atrocidades tales como el asesinato, esto no suele ser cierto. En el Trastorno de Personalidad Límite o Borderline existe mayor riesgo de que la persona se infrinja daño a sí misma que a otras personas. Por ello estas películas nos sirven más bien para explorar el manejo de las emociones, el dolor que sienten y cómo lo manejan, el terror al abandono, las adicciones al sexo, alcohol, drogas…el pensamiento dicotómico… Espero que os gusten.
Atracción Fatal (Fatal Attraction). Dirigida por Adrian Lyne (1987). Dan Gallagher (Michael Douglas) lleva una vida perfecta: tiene una esposa maravillosa, una hija encantadora y un buen trabajo. En una fiesta conoce a Alex, una atractiva mujer que lo seduce. Pero para Dan se trata únicamente de una aventura ocasional. Alex, en cambio, cuando él le anuncia el fin de la relación reacciona con una violencia inaudita. No acepta ser rechazada y sus sentimientos se convierten en una obsesión enfermiza y peligrosa…
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Fucking Amal. Dirigida por Lukas Moodysson (1998). La película relata la historia de Agnes Ahlberg y Elin Olsson, alumnas de secundario en el «insignificante» pueblo de Åmål. Elin es extrovertida, popular y ha estado con innumerables chicos, pero encuentra su vida exasperantemente aburrida. Agnes, por el contrario, es tímida y no ha conseguido hacer amigos desde que se mudó con su familia a Åmål hace un año. En esta película podréis ver el tema de las autolesiones en el TLP.
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Inocencia Interrumpida (Girl, Interrupted). Dirigida por James Mangold (1999). Basada en una historia real. Susanna Kaysen (Winona Ryder), de 17 años, es como la mayoría de las chicas americanas de su edad: está confusa, se siente insegura y lucha por entender el mundo que la rodea. Su psiquiatra decide ingresarla en el Hospital Claymoore, diagnosticándole un trastorno de la personalidad, que se manifiesta a través de una gran inseguridad respecto a la propia imagen, a los objetivos a largo plazo y a los amigos. En el centro Susanna conoce a Lisa, Georgina, Polly y Janet, un grupo de chicas inadaptadas con las que entabla una estrecha amistad y que, además, le muestran el camino para encontrarse a sí misma.
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La Pianista (La Pianiste). Dirigida por Michael Haneke (2001). Erika Kohut (Isabelle Huppert) es profesora de piano en un prestigioso conservatorio de Viena. Vive con su madre, una mujer dominante con quien mantiene una difícil relación de amor-odio, y bajo su aspecto serio y disciplinado oculta inesperados comportamientos sexuales de tendencia masoquista. Tras escucharla tocar en un concierto privado, el joven Walter Klemmer se propone conquistarla. Una película no apta para público sensible, es desagradable, inquietante y hasta repugnante, pero a la vez maravillosa y muy bien rodada, con unas actuaciones magistrales.
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Monster. Dirigida por Patty Jenkins (2003) .Basada en hechos reales. Aileen Wuornos (Charlize Theron) es una prostituta que, al borde de la desesperación y del suicidio, conoce un día en un bar a Selby Wall (Christina Ricci), una joven lesbiana, que ha sido enviada por sus padres a vivir con su tía para «curar su homosexualidad». Wuornos, víctima de una trágica infancia llena de abusos, rápidamente se enamora de Selby, encontrando en ella una razón para vivir. Incapaz de encontrar un trabajo digno, Wuornos sigue ejerciendo la prostitución. Cuando uno de sus clientes la maltrata, ella lo mata en defensa propia, comenzando así una trágica cadena de asesinatos. Esta es la historia de una asesina, pero también una historia de amor entre dos inadaptadas. Una película excelente para ver el Trastorno de Personalidad Límite y el de Dependencia.
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«El perfecto nº2»: Trastorno de Personalidad Obsesivo
El Trastorno de Personalidad Obsesivo se enmarca dentro de los trastornos de la personalidad, es decir, se trata de un conjunto de patrones estereotipados rígidos como forma de reaccionar ante el ambiente. En términos más sencillos, podemos decir que se diagnostica un Trastorno de Personalidad cuando ciertos rasgos, que se consideran propios de la personalidad de ciertos sujetos, resultan perjudiciales para ellos mismos o para terceros.
El Trastorno de la Personalidad Obsesivo es un Trastorno de Personalidad caracterizado por un patrón general de preocupación por el orden, perfeccionismo, control mental e interpersonal, a expensas de la flexibilidad, la apertura y la eficiencia.
Hay que diferenciarlo del Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), ya que éste se enmarca dentro de los Trastornos de Ansiedad. En el TOC, las obsesiones causan un gran malestar y sufrimiento al sujeto (son egodistónicas), mientras que en el Trastorno de Personalidad Obsesivo estas obsesiones no suponen ningún sufrimiento, es decir, son egosintónicas. El Trastorno de Personalidad tiene a su vez un origen más primario, y por tanto, más grave que el TOC, ya que se gesta desde etapas tempranas del desarrollo. Psicoanalíticamente hablando, los trastornos de la personalidad son estructuralmente pre-edípicos, luego no pueden coincidir con la neurosis (donde sí entra el TOC), ya que la neurosis está metida de lleno en el complejo edípico (es decir, en la triangulación y aceptación de un tercero en la relación: “aceptar que dos personas se relacionan entre sí sin mí”) y por ello los neuróticos sufren bastante con su trastorno. En el trastorno de personalidad no hay por tanto sufrimiento con la obsesión, no existe esa culpa que hay en el neurótico, y estas personas suelen ir a consulta porque los mandan sus familiares o gente cercana, ya que ellos se suelen encontrar bien.
Veremos ahora un conjunto de las características principales que presentan estas personas:
- Las personas con un Trastorno de Personalidad Obsesivo son perfectos «nº 2», pero son muy rígidos y exigentes con sus subordinados, con «los que tienen por debajo». Con sus superiores son «yo niño», con los de abajo colocan ese «yo niño» a los subordinados, reproduciendo esa autoridad que además no se la pueden tocar. Esto les dificulta manejarse con el tuteo, con la paridad.
- Presentan una dedicación excesiva al trabajo y a la productividad con exclusión de las actividades de ocio y las amistades. Pueden ser reacias a delegar tareas o trabajo en otros, a no ser que éstos se sometan exactamente a su manera de hacer las cosas.
- El afán de perfeccionismo en las personas con un Trastorno de Personalidad Obsesivo es tal, que interfiere con la finalización de las tareas (p. ej., es incapaz de acabar un proyecto porque no cumple sus propias exigencias, que son demasiad…o estrictas). La preocupación por los detalles, las normas, las listas, el orden, la organización o los horarios, puede llegar hasta el punto de perder de vista el objeto principal de la actividad.
- Las personas con un Trastorno de Personalidad Obsesivo miden por centímetro cada palabra, cuidando excesivamente su lenguaje, ya que éste es una forma de control.
- Tienen muchas dificultades para manejar el afecto, no saben cómo manejarlo, ya que estas personan no han recibido afecto desde niños, no han tenido esas manifestaciones afectivas, que hace que sean incapaces de expresarlo.
Este trastorno es más común entre los hombres, y es uno de los que mejor pronóstico tienen en su tratamiento dentro del conjunto de Trastornos de Personalidad.
Cine sobre el Trastorno de Personalidad Obsesivo
«Lo queda del día» («The Remains of the Day»). Dirigida por James Ivory (1993). En 1958, Stevens (Anthony Hopkins), un perfecto mayordomo, trabaja para un millonario americano (Cristopher Reeve) que es el nuevo propietario de Darlington Hall, mansión que vivió su etapa de mayor esplendor veinte años antes, cuando su dueño, un aristócrata británico, reunía en su casa a los políticos y a los personajes más influyentes de los años 30, una época crucial para el futuro de Europa. Esta circunstancia permitió a Stevens ser testigo de conversaciones sobre los hechos políticos más importantes del momento. Al mismo tiempo, su rutinaria vida personal sufría un inesperado cambio con la llegada de una nueva ama de llaves, la señorita Kenton (Emma Thomson). En esta obra maestra del cine podréis una interpretación magistral de Anthony Hopkins sobre una persona con un Trastorno de PErsonalidad Obsesivo, podréis observar ejemplos de esa incapacidad para manejar los afectos, la inflexibilidad, el perfeccionismo, el lenguaje cuidado hasta el extremo, la proyección de la autoridad a los subordinados…una delicia de película que no te deja indiferente.
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«Gente Corriente» («Ordinary People»). Dirigida por Robert Redford (1980). Conrad acaba de salir del hospital después de haber intentado suicidarse a raíz de la muerte de su hermano en un accidente. Mantiene una relación muy tensa con su madre y vive atormentado por sentimientos de culpa. Aunque visita todas las semanas a un psiquiatra, no se siente a gusto hasta que conoce a una compañera del coro y empiezan a salir juntos. Extraordinaria película donde no sólo podras ver a una madre obsesiva y su relación fría y distante con su hijo, sino cómo influye un acontecimiento traumático en el seno de una familia, cómo se relacionan entre ellos entre la depresión, los sentimientos de culpa, la obsesión…
Podéis ver una escena de la película haciendo click en la imagen:
«Sólo te tengo a tí» («A la folie, pas du tout»). Dirigida por Laetitia Colombani (2002). Angélique (Audrey Tautou) es una joven enamorada perdidamente de un cardiólogo casado a punto de ser padre, pero su amor es tan intenso que está dispuesta a llegar a la locura… o a hacer cualquier locura con tal de conquistar al hombre de sus sueños. Ejemplo de una personalidad obsesiva con erotomanía.
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«El puente sobre el río Kwai» («The Bridge on the River Kwai»). Dirigida por David Lean (1957). Esté clásico del cine nos permite ver un ejemplo de personalidad obsesiva en el papel del coronel Nicholson (Sir Alec Guinness, conocido por hacer de Obi Wan Kenobi en Star Wars). Durante la Segunda Guerra Mundial un grupo de prisioneros británicos son obligados por los japoneses a construir un puente. Los oficiales, capitaneados por su flemático coronel, se opondrán a toda orden que viole la Convención de Ginebra sobre los derechos y las condiciones de vida de los prisioneros de guerra.
Podéis ver el tráiler de la pélícula haciendo click en la imagen:
«A propósito de Henry» (Regarding Henry). Dirigida por Mike Nichols (1991). Un brillante y rico abogado es tiroteado durante un atraco a un supermercado. Su cerebro queda dañado y, además, sufre amnesia total: no recuerda nada de su vida anterior. A partir de ese momento, tendrá que aprender a hablar, a andar, a leer…Estupenda película para ver cómo es una estructura de personalidad obsesiva bastante rígida en el papel de Henry (Harrison Ford) antes de que le suceda el desgraciado accidente.
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Comida para las emociones. Neuroalimentación para que el cerebro se sienta bien. Sandi Krstinic
Es posible comer felicidad, porque la felicidad procede de la alimentación
Comida para las emociones nos familiariza con las sustancias que nuestro cerebro necesita para gestionarse a sí mismo del mejor modo posible. La aparición de un determinado sentimiento exige la síntesis de neurotransmisores específicos, para lo cual es imprescindible el consumo de ciertos alimentos. De ahí que en el siglo del cerebro la neuroalimentación sea la mejor alimentación posible para sentirse a gusto, activo, relajado y feliz.
Esta singular obra se distingue en aspectos cruciales de los textos especializados que se basan exclusivamente en hechos probados. Su espíritu innovador y ejemplar abre un nuevo y particular modo de abordar temas de biomedicina y psicología. Su autor, siguiendo un impulso propio y lleno de entusiasmo, vincula hechos, experiencias y sentimientos.
Se trata de un libro innovador e interesante que de principio a fin inspirará en el lector inesperados pensamientos, reacciones y empresas.
La enfermedad de la duda: TOC
La duda es el pensamiento típico del obsesivo. En verdad, es una exageración del pensamiento general y normal de las personas. En nuestra vida tiene cabida el azar, y por tanto la duda. Pero en el pensamiento normal ésta es operativa y nos sirve para sopesar, valorar, analizar las diferentes opciones y caminos que nos van surgiendo en la vida.
La duda en el obsesivo es paralizante. Son enfermos de la duda. Dar alternativas es lo que hace a la duda sana, sin embargo, en el obsesivo el pensamiento está pervertido y se convierte en un pensamiento circular que no se resuelve nunca.
El pensamiento circular está formado por cavilaciones, historias que no se resuelven, pervirtiendo la función del pensamiento normal de «preparar a la acción». El obsesivo pretende resolver los problemas con certidumbre 100%. Esto se transforma en las obsesiones, es decir, pensamientos circulares que no se resuelven nunca y producen ansiedad. El antídoto para combatir la obsesión es el rito.
Los ritos son acciones sucesivas que tienen un fin, reducir esa angustia que se produce. Pero el medio para resolver es circular también. Todos los pasos del rito se hacen minuciosamente y tampoco se resuelven nunca: al cabo del tiempo se repiten otra vez ya que se satisface sólo momentáneamente: es compulsivo.
La persona «capturada» entre el pensamiento circular y la compulsión del rito no necesita ayuda de nadie para que le diga lo absurdo de su conducta: el obsesivo es el que mejor conoce su enfermedad. Su idea es obsesiva: es patológica, el sujeto considera la idea absurda pero no puede salir de ella ni corregirla. Ningún obsesivo está plácido, las ritualizaciones no le arrancan de la realidad provocando una sensación pobre y torturante que le hace padecer un enorme sufrimiento con su obsesión.
Esta particularidad es una de las diferencias entre la Neurosis Obsesiva y los Trastornos de Personalidad Obsesiva, donde no hay tortura por las obsesiones ya que son egosintónicas.
Los temas más comunes de las obsesiones son:
- Contaminación
- Daño accidental no debido a contaminación o violencia física
- Violencia física hacia sí mismo u otros por parte de uno mismo u otros
- Conducta socialmente inaceptable
- Sexo
- Religión
- Acumulación
- Orden, simetría, exactitud
- Muerte
- Enfermedad o temas somáticos.
¿Soy un Obsesivo?
Fenómenos similares a las obsesiones y compulsiones son relativamente frecuentes en la población general, por ejemplo, en los pensamientos desagradables que a veces nos asaltan, en las supersticiones (tocar madera, llevar un amuleto, repetirse cierta frase), en los pensamientos utilizados para neutralizar otros pensamientos, en las conductas repetitivas de comprobación, lavado y …orden)…Muchas de las cogniciones intrusas en población general tienen que ver con los siguientes temas: salud personal, experiencias embarazosas o dolorosas, conducta sexual personalmente inaceptable, agresión y daño, amigos o familiares sufriendo un accidente o una enfermedad.
Las manifestaciones obsesivas y compulsivas en la población normal son similares en forma y contenido a las obsesiones y compulsiones observadas en población clínica; las diferencias estriban en que son menos frecuentes, intensas, duraderas, vívidas y molestas, son más manejables y fáciles de rechazar, generan menos resistencia e interfieren menos en la vida. Para poder hablar de TOC, las obsesiones o compulsiones deben causar fuerte malestar, consumir tiempo (más de una hora diaria) o interferir significativamente con la rutina normal de la persona, con su funcionamiento laboral (o académico) o con sus actividades o relaciones sociales acostumbradas.
Algunas actividades como comer, jugar, consumir sustancias o practicar sexo son etiquetadas de compulsivas cuando se llevan a cabo en exceso. Sin embargo, no son auténticas compulsiones porque la persona obtiene placer de las actividades y puede desear resistirse a las mismas sólo a causa de sus consecuencias nocivas.
El Arte de Amargarse la Vida, Paul Watzlawick
«Un hombre quiere colgar un cuadro. El clavo ya lo tiene, pero le falta un martillo. El vecino tiene uno. Así pues, nuestro hombre decide pedir al vecino que le preste el martillo. Pero le asalta una duda: ¿Qué? ¿Y si no quiere prestármelo? Ahora recuerdo que ayer me saludó algo distraído. Quizás tenía prisa. Pero quizás la prisa no era más que un pretexto, y el hombre abriga algo contra mí. ¿Qué puede ser? Yo no le he hecho nada; algo se habrá metido en la cabeza. Si alguien me pidiese prestada alguna herramienta, yo se la dejaría enseguida. ¿Por qué no ha de hacerlo él también? ¿Cómo puede uno negarse a hacer un favor tan sencillo a otro? Tipos como éste le amargan a uno la vida. Y luego todavía se imagina que dependo de él. Sólo porque tiene un martillo. Esto ya es el colmo. Así nuestro hombre sale precipitado a casa del vecino, toca el timbre, se abre la puerta y, antes de que el vecino tenga tiempo de decir «buenos días», nuestro hombre le grita furioso: «¡Quédese usted con su martillo, so penco!»» (Paul Watzlawick).
El nuevo libro de Paul Watzlawick se puede leer medio en broma y medio en serio.
Es posible que el lector encuentre en este libro algo de sí mismo, a saber, su propio estilo de convertir lo cotidiano en insoportable y lo trivial en desmesurado.
Además, aun cuando el autor no lo confiese en ninguna parte, este libro constituye una única y extensa «prescripción sintomática», un doble vínculo terapéutico muy al estilo del denominado «Grupo de Palo Alto». El psicoterapeuta o asistente seguramente sabrán leer entre las líneas de estas páginas maliciosas mucho material que tiene un significado directo para el diálogo terapéutico: metáforas, viñetas, chistes, anécdotas socarronas y otras formas de hablar del «hemisferio derecho», que son infinitamente más eficaces que las interpretaciones solemnes y graves de las actitudes erróneas de los humanos.
«El Arte de Amargarse la Vida». Paul Watzlawick. HERDER, 2003.
Nuevos acuerdos para divulgar la Psicología en los medios de comunicación
El Departamento de Comunicación del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid ha establecido en los últimos meses diferentes acuerdos de colaboración con diversos medios de comunicación con el objetivo de difundir y divulgar la Psicología y el trabajo que realizan sus profesionales.
Radio 5 Todo Noticias. Acuerdo con el programa De ida y vuelta que se emite en Radio 5 Todo Noticias de Radio Nacional de España y está dirigido por la periodista Dª Inmaculada Palomares. Se trata de un magacín en el que se abordan diferentes reportajes y entrevista de actualidad. El programa se emite los viernes de 15.15 a 17.00 h y los domingos de 18.00 a 21.00 h. En este programa se emitirá un espacio de Psicología los domingos entre las 19.05 y las 19.20 h. En él, diferentes rofesionales tratarán temas de interés psicológico.
Diario digital El Confidencial. Este medio se ha convertido en el sexto diario digital español, según el último informe de la Oficina de Justificación de la Difusión (OJD). El número total de visitas mensuales al diario, según el estudio realizado por la empresa especializada NIELSEN, es de más de 13 millones. En este diario se han creado, dentro de la sección «Alma, corazón y vida», tres nuevos espacios sobre Psicología:
- «El Arte de Vivir». En esta sección diferentes miembros del grupo de trabajo del Colegio Psicología y Medios audiovisuales y Artes escénicas escribirán cómo pueden acercarse los ciudadanos, desde el punto de vista psicológico, a una determinada película, novela o pieza teatral de actualidad.
- «PSICÓLOGOS 4 YOU». En esta sección diferentes psicólogos abordarán temas de interés desde el punto de vista de la Psicología Clínica.
- «Relaciones entre padres e hijos». Este espacio está dedicado a publicar artículos sobre aquellos temas que ayuden a mejorar la relación entre padres e hijos.
Grupo Editorial Bayard. A través de esta colaboración un grupo de psicólogos, en colaboración con la Vocalía de Intervención Social del Colegio y especializados en el área del mayor, divulga el trabajo y la labor que realizan los psicólogos en la atención a las personas mayores, mediante la publicación de artículos que tratan temas de interés en la página web plusesmas.com y la revista Plus es más.
Fuente: © Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid.
Cine sobre el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)
«El aviador». Dirigida por Martin Scorsse (2001). Cuenta la historia de los primeros cuarenta años la vida de Howard Hughes (Leonardo DiCaprio). Un hombre obsesionado con las mujeres hermosas, con la fabricación de películas, y con el diseño y vuelo de aviones más grandes y rápidos hasta cerca de su propio fallecimiento. Hughes padecía otra obsesión, ahora reconocida como el trastorno obsesivo compulsivo (TOC). Hughes estaba obsesionado por la amenaza de infecciones microbianas de los alimentos y de su entorno, y reaccionó evitando el contacto con posibles fuentes de suciedad y por el lavado constante de las manos. Típico de los enfermos de TOC, tampoco podía dejar de repetir una y otra vez ciertas frases que le venían a la mente.
Puedes ver el tráiler haciendo click en la imagen.
«Mejor Imposible». Dirigida por James L. Brooks (1997). Melvin Udall (Jack Nicholson), un escritor obsesivo y maniático, es uno de los seres más desagradables y desagradecidos que uno pueda tener como vecino. Pero, un buen día, tiene que hacerse cargo de un perro al que odia a muerte. La presencia en su vida del animal ablandará su corazón.
Puedes ver un pequeño fragmento de la película haciendo click en la imagen:
«Los Impostores». Dirigida por Ridley Scott (2003). Roy (Nicolas Cage) y Frank (Sam Rockwell) son dos estafadores de poca monta que se dedican a vender artilugios para filtrar el agua. Los compradores están dispuestos a pagar diez veces lo que valen para conseguir falsos premios (coches, joyas, vacaciones en el extranjero) que nunca reciben. La vida de Roy es más bien problemática: padece agorafobia, es un maníaco compulsivo y carece de relaciones personales; a veces, no tiene más remedio que visitar a un psicoanalista. Gracias a la terapia que sigue, se entera de que tiene una hija adolescente, cosa que nunca había querido confirmar; pero resulta que ella quiere conocerlo. Al principio, la aparición de la chica perturba la ordenada rutina de su neurótico padre, pero poco a poco, Roy empieza a disfrutar de una relación que nunca había soñado tener.
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«La madre buena» en la Neurosis Obsesiva.
La familia en los pacientes neuróticos obsesivos es fundamental para poder comprenderlos. Vamos a ver cómo suele ser su estructura, centrándonos sobre todo en las madres de estos pacientes.
Las madres de los obsesivos son madres excelentes, siendo muy difícil «agredirlas», y cuando se hace se paga muy caro con la culpa. Estas mujeres generalmente son muy superyoicas, autoexigentes y normativas, empezando por ellas mismas y también por ende con sus hijos. Por ello son madres que limitan mucho, más allá de lo razonable. Son mujeres sobriamente entregadas, sólidas, no dramáticas, con mucha consistencia.
Pero, ¿dónde están los afectos?. Hay una cierta carencia afectiva en estas madres. Las propias normas y deberes ahogan los afectos, aunque quieran a sus hijos. Un niño no percibe el afecto en ellas. Son madres que por ejemplo pueden tocar poco a sus hijos, aunque sí atenderlos escrupulosamente. Se implican todo lo que pueden pero la sensación que irradian es de lejanía. Pero, una mujer tan preocupada por sus hijos y su familia es muy difícil de atacar.
Los padres que se únen a estas mujeres son más afectivos, menos normativos, cumplidores, que aceptan las reglas de la mujer. Puertas afuera llevan el orden social, y puertas adentro lo lleva la mujer. Aún así sigue existiendo una atmósfera consistente. Ambos protegen al hijo a su manera. El resultado es una familia bien trabada, con pocas fisuras, muy organizada.
Pero, ¿qué ocurre con los niños ante esta situación familiar?.
Los niños son hiperguiados o hiperprotegidos. Las normas surgen de una manera precoz. Cuando el niño descubre que hay cosas que pasan que no regula él, ya está maduro para poder acatar las normas y entender que hay normas que le trascienden. La precocidad con que las normas se introyectan, la agresividad que eso produce y la incapacidad de liberar esa agresividad a la madre, provoca unas culpas gigantescas: La absoluta represión de la agresión es patológico.
Los niños entran en el registro de lo real muy pronto, por lo que en el futuro les resultará muy complicado usar la imaginación. Con el tiempo, se convierten en enfermos del control, más allá donde el control no se puede controlar. La angustia provoca la necesidad de controlar una situación que es incontrolable, llevando al sujeto a una «formación reactiva»: en vez de asumirlo, se produce una idea de hipercontrolarlo todo. Pueden confundir «lo probable» con «lo posible» y la duda se convierte en su pensamiento típico, ya que buscan resolver los problemas con una certidumbre del 100%.
Cómo dejar de hacerse pajas mentales y disfrutar de la vida.
«Este libro, como su título indica, quiere ayudarte a que dejes de hacerte pajas mentales y, por lo tanto, a que consigas disfrutar de la vida. Porque, créeme, para disfrutar de la vida sólo hace falta dejar de hacerse pajas mentales. Piénsalo bien, si no: ¿de dónde provienen casi todos tus males? De las vueltas que le das a la cabeza —o sea, a la mente— por este o aquel asunto, ¿no? Pues, entonces, para qué seguir hablando: es evidente que tengo razón. Pero, antes, sé sincero contigo mismo: ¿quieres, de verdad, dejar de hacerte pajas mentales? ¿Quieres, de verdad, disfrutar de la vida?.»
(Giulio Cesare Giacobbe)
Detrás de este título provocativo se esconde un manual que cualquier neurótico, o aspirante a tal, debería llevar siempre en el bolsillo. La neurosis, y en especial su forma más difundida, la neurosis ansioso-depresiva que afecta hoy en día a la mayoría de la población, nos inunda de miedos y angustias que no nos permiten disfrutar de la vida y de las relaciones con los demás. Un pequeño gran libro, con mucho éxito en otros países, redactado con un especial sentido del humor que hace la lectura amena y entretenida.
«Cómo dejar de hacerse pajas mentales y disfrutar de la vida». Giulio Cesare Giacobbe. La esfera de los Libros, 2004.